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domingo, mayo 24, 2009

Tour Viene Luisito 2009, vol. 2: Bogotá, Colombia

Este post lo comencé a escribir cuando llegué a Toronto -el 18 de mayo-
pero es ahora cuando he podido sentarme a terminarlo.


Llegué a Bogotá todavía enfermo del estómago. Durante el vuelo me sentí bien pero cuando terminamos de almorzar, no podía con el dolor. Con toda la pena del mundo tuve que dejar el plato principal y una vez disipada la mesa, corrí al baño. Tras un espectáculo intestinal bastante vergonzoso e indescriptible, salí del baño. La mamá de mi amigo me preguntó que si quería algo, un agua aromática o té, mientras yo para mis adentros pensaba que no me vendría nada mal un corcho. Por fortuna, tras sentirme todo el día como El Gordo Huracán, una cena ligera y una reparadora noche de sueño, se me quitó todo y pude comenzar a disfrutar de Colombia.

Bogotá me recordó mucho a Caracas, con la diferencia de que la gente se ve tranquila y es muy educada. Todos emocionados de mostrar su ciudad, llenos de orgullo. ¡Y tienen que estarlo! Se ve que gozan de una calidad de vida que en Venezuela no se conoce desde hace años y hay un sabor a crecimiento y progreso en el aire. Está llena de vida, de calles por donde serpentea la gente incesante, incansable, entre puestos de arepas y tiendas. Se deja ver como una ciudad con los problemas típicos de cualquier ciudad grande del mundo pero con un futuro prometedor.


Muchas cosas qué ver y hacer:
  • El Centro/La Candelaria: como buena ciudad colonial, una cuadrícula alrededor de la Plaza de Simón Bolívar, con la Catedral, el Capitolio Nacional y más allaíta el Palacio Nariño-donde trabaja y vive el Presidente de la República.
  • Los museos: la mayor parte de los museos presenta sus colecciones con una curaduría esmerada y atractiva. Los mejores: el Museo Nacional, el Museo Botero, el Museo del Oro.
  • Zonas aledañas: el pueblo de Usaquén, el pueblo de Zipaquirá con su imponente Catedral de Sal.
  • Los sitios para sentarse: en general la comida me pareció barata... claro, cualquier cosa es barata después de pasar por Caracas. Los típicos: Crepes & Waffles, Bogotá Beer Company, Café Juan Valdez, Oma Café.
  • El transporte: a falta de sistema subterráneo, la ciudad cuenta con un sistema integrado de autobuses en canales dedicados llamado TransMilenio y que cubre prácticamente toda la ciudad. También están los tradicionales carritos por puesto y si se está en apuros, los taxis-todos con taxímetro.
  • La Calera: es un municipio cercano. En la vía, subiendo el cerro, hay miradores, restaurantes y sitios nocturnos que ofrecen una espectacular vista de la ciudad.
  • El Parque de la 93: un parque alrededor del cual hay restaurantes, galerías y sitios nocturnos.
  • La Zona Rosa y la T: otra área para caminar y explorar, llena de restaurantes, locales nocturnos, centros comerciales. Destino obligado los fines de semana.
  • La sabana: montarse en un carro, manejar 45 minutos y encontrarse en el más verde páramo. Un escape de la vida citadina ideal durante esos domingos cuando provoca comerse un postrecito.
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Me rehúso a dormir por las tardes porque me sienta mal. Sin embargo, vencido por el sueño de haber volado de nuevo a Toronto durante la noche, me acosté a dormir unos minutos. Es quizá el cansancio que todavía tengo, pero cuando desperté no sabía dónde estaba.

Fue una de esas "vacaciones donde uno no descansa" pero valió la pena ciento por ciento. Muchas gracias a toda la gente que hizo este viaje tan especial, tanto el volumen I como el volumen II.

Ya para finalizar, también aprendí una palabra nueva: tostión, el proceso mediante el cual se tuestan los granos de café y que da como resultado una bebida más o menos oscura. Nada tiene que ver, a pesar de su cercanía fonética y gramática, con ese curioso fenómeno que se da lugar en las discotecas (usualmente latinas) y que se ha hecho común con la popularización del género del reggaetón en los últimos años: el recueste de tostión.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdona que me ría de tus desgracias, Luis, pero reconozco que me reí MUCHO con el inicio de este post!

Sara dijo...

ja , te olvidaste del recueste de tostion en el metro.. importantisimo! debe ser porque los cachacos no tienen metro que no saben de esta popular actividad subterranea.

Anónimo dijo...

chamo bogota es una de las ciudades mas espectadulares de la tierra y por ese precio para nosotros es una ganga... No te metiste a hacer agosto en "Arturo Calle" ???
Anibal Guerra